A escasas horas de nuestro viaje a Almagro para participar en la próxima edición del encuentro CaixaEscena, recordamos el último montaje de Pulchinela: Disimulando, de Consuelo Armijo.
Este año, cambiamos por completo de tercio y presentaremos La Paz, de Aristófanes. Memorizando el guión y ensayando una y otra vez nuestro papel, no está de más recordar cómo interpretamos a otros personajes... muy distintos a los que ahora vamos a dar vida.
2014 se ha estrenado con fuerza, ganas y mucha, mucha ilusión.
Celebramos el comienzo de año con una nueva salida del Grupo Münchhausen, bautizado así por la primera representación a la que asistimos todos los fanáticos del teatro que formamos parte de Pulchinela.
La obra fue un lujo: pudimos disfrutar de una Carmen Maura espléndida, nada más y nada menos que en el Teatro María Guerrero, protagonizando Carlota, de Miguel Mihura, en un papel que tal y como dijo la crítica parecía escrito para ella. La jornada no pudo ser más completa: parada de rigor ante el Café Gijón, los previos en el Café del Espejo y la guinda vino compartiendo local con los actores a la salida de la función. Una tarde con sabor muy literario y algo burgués, según apuntó una de nuestras actrices.
Y ahora nos encontramos inmensos en la vorágine de los preparativos del atrezzo para nuestro montaje de La Paz, en una versión muy particular de la obra de Aristófanes. Decorado, vestuario, ensayos... aprendernos bien el texto (fundamental) y tener todo listo antes de nuestro viaje a Almagro para participar en los Encuentros de CaixaEscena de este año.
Como testimonio de tanto esfuerzo (y entusiasmo) os dejamos nuestro vídeo de presentación:
